Laos, un país humilde y lleno de sorpresas.
Uno de los países menos desarrollados del sudeste asiático, pero con uno de los mejores paisajes de todo este territorio.
Un lugar de gente sencilla y abierta a una sonrisa, que te hará vivir experiencias únicas, a un ritmo mucho menor del que probablemente estás acostumbrado. Un destino especial para aprender a no hacer nada, y para desconectarse completamente de todo, observando gente viviendo de una manera completamente distinta.

Capital: Vientián.
Conexión a Internet: Internet Aceptable. Disponible en principales ciudades.
Seguridad: Un país seguro, aunque obviamente se recomienda tomar las precauciones de siempre.
Agua Potable: Es necesario comprar agua embotellada.
Requisitos de entrada: Visa a la llegada.
Moneda: Kip.
Idioma: idioma laosiano o lao.
Mejor época para viajar: De noviembre a Mayo. Hay menos lluvia, y temperaturas más agradables.
Comida típica: Larb o Laap.
Moverse entre ciudades: A pesar de ser uno de los países menos desarrollados del sudeste asiático, el sistema de transporte entre ciudades es bastante bueno, por lo que es fácil moverse para hacer conexiones.
A diferencia de en sus países vecinos, la gente de Laos no se siente identificada con el regateo, por lo que el precio de las cosas es más o menos el mismo en todos lados. Lo cual lo hace bastante menos agotador.
Hay sleeping buses para viajes entre ciudades. Se pueden encontrar precios de buses más baratos en los buses locales, pero son bastante más agotadores, y demoran más también.
Ciudades recomendadas: Vanvieng, Luang Prabang, Vientiane, Don Det en 4000 islas, en el Mekong.